El Pleno municipal aprueba una moción de apoyo a la campaña popular en defensa de la población mayor y pide a la banca que adopte medidas frente a la brecha digital.

El Pleno del Ayuntamiento de Agüimes aprobó este lunes, en su sesión ordinaria correspondiente al mes de febrero, una moción presentada por el Grupo Roque Aguayro en apoyo a las reivindicaciones de la campaña popular ‘Soy mayor pero no idiota’, que reclama un mejor trato de la banca a las personas mayores. Esta iniciativa, liderada por el jubilado valenciano Carlos San Juan, pide una atención más humana en las oficinas bancarias, de forma que se evite la exclusión de un segmento significativo de la población que no puede realizar el tránsito hacia unos servicios financieros plenamente digitalizados.

La brecha digital –dice la moción­– se ha convertido en un nuevo factor de exclusión social, una especie de analfabetismo del siglo XXI, que la pandemia de covid-19 y el proceso acelerado de digitalización han intensificado en casi todos los ámbitos de la vida cotidiana. Un 35% de la población —uno de cada tres ciudadanos— se siente afectado por lo que se denomina apagón digital, es decir, la imposibilidad de manejarse en la esfera digital, por no contar con dispositivos, conexión o habilidades necesarias para la gestión telemática de sus asuntos cotidianos.

Con la pandemia, la digitalización se ha acelerado en sectores como la banca, en donde las personas mayores se sienten más perdidas que nunca a la hora de realizar gestiones cotidianas. A medida que los bancos se vuelcan en la atención online o en la prestación de servicios exclusivos a través de internet, están produciendo más clientes desplazados y vulnerables, para quienes hacer un simple ingreso, sacar dinero o realizar el pago de sus recibos supone un auténtico quebradero de cabeza. La restricción del trato personal aboca a estas personas a la pérdida de su privacidad financiera, al tener que pedir ayuda a personas ajenas a las entidades bancarias, arriesgándose a ser víctimas de fraudes y atropellos. La transformación de la vida económica y social, dice la moción, debe tener en cuenta a estas personas, principalmente mayores, a quienes la brecha digital les está haciendo sentirse inútiles, inseguros y desprotegidos.

La moción aprobada por el Ayuntamiento de Agüimes recuerda que la inmensa mayoría de las entidades bancarias de nuestro país fueron rescatadas con fondos públicos después de la última crisis financiera de 2008. La banca tiene el deber ético de atender a estas personas con el respeto y la consideración que merecen.